LA TEORÍA DEL TODO

 

Título original         The Theory of Everything

Año        2014

Duración        123 min.

País         Reino Unido

Director         James Marsh

Guión            Anthony McCarten (Libro: Jane Hawking)

Música              Jóhann Jóhannsson

Fotografía           Benoît Delhomme

Reparto             Eddie Redmayne, Felicity Jones, Charlie Cox, David Thewlis, Emily Watson, Simon McBurney, Charlotte Hope, Adam Godley, Harry Lloyd, Maxine Peake, Joelle Koissi, Zac Rashid, Hugh O'Brien, George Hewer, Georg Nikoloff, John W.G. Harley

Productora          Working Title Films

A la izquierda Stephen y Jane el día de su boda. A la derecha la recreación en la ficción.

Biopic del archiconocido astrofísico Stephen Hawkins desde que empezó su doctorado hasta nuestros días.

La cinta refleja de manera amable y claramente encaminada a llegar a todos los rincones del planeta la singular historia de una de las mentes más brillantes de la historia, un científico eminente atrapado en un cuerpo con una grave enfermedad degenerativa que atrofiaba sus músculos y sus funciones motoras.

Hoy en día es rara aquella persona que no ha oído hablar de Hawkins, bien por sus trabajos en el campo de la astrofísica donde es toda una eminencia o bien porque mediáticamente en los últimos años se le está dando un reconocimiento a nivel global que su personalidad merece. Todos le hemos visto en los Simpsons o en las continuas referencias en The Big Bang Theory, o en sus apariciones presentando sus libros. Su imagen con su inseparable silla pertenece a la imaginería popular de este siglo y finales del anterior.

Era muy fácil caer en el recurso de la enfermedad de Stephen y desarrollar la película como un drama lacrimógeno destinado a dar pena mostrando el calvario por el que tuvo que pasar cuando dicha enfermedad se fue agravando, haciendo más difícil no sólo su labor como científico, sino poniendo trabas a la relación con su esposa, una abnegada joven que pese a que la esperanza de vida que le dieron a su marido era muy corta, decidió luchar y permanecer a su lado.

El mismísimo Hawkins acudió al rodaje de la película. Aquí le vemos posando con Redmayne

Aunque es inevitable el tratamiento del estado físico de Hawkins, el director no tomó ese atajo y cuenta la vida del científico como una historia de superación de un personaje único y singular. No es una película para dar pena.

La interpretación de su protagonista Eddie Redmayne es de esas por las que cualquier actor vendería a su madre para poder quedarse con él. Es un papel predestinado a premios y alabanzas sin fin (como así fue) pero Redmayne no lo desaprovechó y cuajó una interpretación notable y altamente creíble. También Felicity Jones logra dar un buen nivel en su papel de la sufrida Jane (autora del libro en el que se basa esta película)

Eddie, clavando su personaje. En esta ocasión posando con su "hijo"

Buena cinta aunque tampoco me parece para tanto como se ha hablado por ahí.

Para mi lo mejor de la película es que la figura de Hawkins despierte y pueda inspirar a alguien para dedicarse a la ciencia, a investigar el origen de los agujeros negros, el estudio del cáncer o en cualquier otro campo antes que ver Tele 5.