martes, 17 de diciembre de 2013

EL HOBBIT: LA DESOLACIÓN DE SMAUG


Título original   The Hobbit: The Desolation of Smaug (The Hobbit 2)
Año   2013
Duración   160 min.
País   Estados Unidos
Director   Peter Jackson
Guión   Philippa Boyens, Peter Jackson, Fran Walsh, Guillermo del Toro (Novela: J.R.R. Tolkien)
Música   Howard Shore
Fotografía   Andrew Lesnie
Reparto   Martin Freeman, Ian McKellen, Richard Armitage, James Nesbitt, Aidan Turner, Graham McTavish, Jed Brophy, Luke Evans, Benedict Cumberbatch, Stephen Hunter, Ken Stott, Evangeline Lilly, Orlando Bloom, John Callen, Adam Brown, Dean O'Gorman, William Kircher, Peter Hambleton, Mark Hadlow, Lee Pace, Sylvester McCoy, Cate Blanchett, Mikael Persbrandt, Stephen Fry, Ryan Gage
Productora   Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) / New Line Cinema / WingNut Films
Bilbo se desconcentraba muy fácilmente. Es ver mariposas y perder el oremus.
Peter Jackson vuelve a la carga y lo hace con una película bastante superflua -según los entendidos en la materia, yo no he leído el libro de Tolkien- e incluso mete personajes que no debían estar y situaciones que no son fieles a la obra.

Los enanos y sus narices de patata
A modo de resumen si en la primera parte (crítica AQUÍ) Gandalf juntaba a los enanos y a Bilbo para tratar de recuperar las tierras de los enanos tomada por el dragón Smaug y ya de paso ver que algo oscuro se cierne sobre la Tierra Media, en esta segunda, continúa esa expedición con sus caminatas (más caminatas...) camino de Erebor mientras se van encontrando más orcos, más monstruos, más dificultades... y algunos elfos con los que tendrán sus más y sus menos.

Kate se trajo esas orejas de la isla de Perdidos.
Pues que quieren que les diga, uno salió pelín decepcionado de ver como el Tour de Force a que son sometidos Thorin y compañía queda a medias ya que el señor Jackson debe ser un poco Smaug (o tal vez sus productores) y debe gustarle mucho el color dorado o el verde dólar para hacer una película que no es más que pura transición entre la primera y la tercera parte, que nos llegará en las navidades del próximo año. Al terminar de verla no pude evitar recordar inmediatamente Piratas del Caribe 2, que si, muy espectacular y tal, pero te sientes un tanto estafado ya que lo que has estado viendo durante más de dos horas y pico no te conduce a nada. Si, vale, tendrá su final dentro de un año, pero uno tiene la sensación de que ésto ha sido alargado artificialmente de una forma muy espectacular, eso sí, con el fin de recaudar (mucho) más dinero.

Bilbo jugando a ser el Tío Gilito
La película como cinta de acción y aventuras cumple su cometido. Persecuciones trepidantes (lo de los barriles está emocionante) y continúa desarrollando la peculiar relación entre nuestro querido Bilbo y su anillo. Además la participación más activa de los elfos le da bastante vidilla al asunto.

Los efectos como no podía ser de otra forma rayan a gran altura, y ver a Smaug cobrar vida es todo un espectáculo.


Légolas en acción de gracias esperando el pavo
En el plano interpretativo, poco que añadir a la primera película, salvo la aparición de Legolas (Orlando Bloom) y Tauriel (una guapísima Evangeline Lilly a la que le quedan bien las orejas puntiagudas). El resto los ya conocidos McKellen, Freeman, Nesbitt... y la voz de nuestro querido Sherlock, Benedict Cumberbatch, que en esta ocasión tampoco podemos verlo de cuerpo presente.

Al guión no se le puede poner peros en cuanto que sabemos que es una peli fantástica que tiene su propias reglas y el espectador sabe de antemano lo que se va a encontrar, luchas épicas, frases de honor y cosas de esas, persecuciones a todo trapo, orcos correteando por ahí... y hasta un poco de pasteleo.

Aunque pueda parecer, no es Willy DeVille y su Demasiado Corassón
En resumen, una peli de las que hay que ver en el cine (aunque te toque detrás una chica que intenta reírse con cualquier cosa, pero no lo consigue, tu asiento esté lleno de palomitas y te tengas que ir a otro, o los chavales de delante se estén poniendo como el quico de comer mientras no paran de comentar todo), aunque Jackson se merece una buena colleja por contar la historia mirando su cuenta corriente más que a los fans.

11 comentarios:

  1. Supongo que es una excusa para intentar alargar el éxito que obtuvo con la trilogía de "El señor de los anillos" Les ocurre con frecuencia a muchos directores. Saludos.

    ResponderEliminar
  2. yo me dormi con la primera :o+


    jaja

    y padecer en el cine con los de atras o los de a lado o de adelante arghhhhh!
    my precious!!

    :P

    a veces uno va con toda la disposición de ver algo tan cacareado por todos y al final te vas un poco frutrado o la padeces las horas que dura

    :)

    jaja pareciera que estuviera hablando de otra cosita jajajajajajaja

    ResponderEliminar
  3. La primer me pareció lenta y aburridilla, pero bueno, tenía cosas guays.

    Todo el mundo está diciendo que "La desolación de Smaug" mola más, y que lo de los barriles está muy bien (cosa que me sorprendió, porque cuando leí el libro hace mogollón fue de las partes que menos me gustó).

    Hace un año dije que seguramente no iría a verla, pero al final caeré. Con que sea como la primera me vale.

    ResponderEliminar
  4. Gracias por la crítica, no me espero de ella más de lo que comentas.

    ResponderEliminar
  5. Me gustó ESDLA, y espero pacientemente a que termine la trilogía antes de empezar a verla. Eso de tener que esperar un año para ver cómo acaba... pues como que no mola ;)

    ResponderEliminar
  6. Pues a mí las películas que Jackson hace sobre el mundo de Tolkien me divierten y emocionan muchísimo. Coincido que eso de tener que esperarse un año para saber en qué termina el asunto es un poco molesto pero me emociono tanto viendo las aventuras de los enanos que lo perdono un poco. Aunque en esta segunda parte el triángulo amoroso estaba bastante de más, por no decir el vicio hollywoodense de poner super-mujeres sólo para que sean la nena de alguien.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. Creo que con haber visto la trilogía de El Señor de los Anillos, ya me llega; enough is enough. Ya que, no soy yo muy fan... sorry!
    - Y ahora, volvemos a repetir aquello que tuvo tantísimo éxito, y añadimos un personaje nuevo (por lo menos han recuperado a la belleza sutil de Evangeline Lilly); pero no me llama para nada.

    Un saludoOo enorme!!

    ResponderEliminar
  8. Muy de acuerdo con lo que has dicho: una auténtica decepción.
    Soy super fan de Tolkien y no voy a perdonar lo de que hayan metido personajes al tun tun solo por ser comerciales. Para mí ha sido la gran cagada del año y lo único que me "anima" es que tuve la suerte de ir al preestreno y pude ver a Luke Evans y a Richard Armitage in person :)
    La escena de los barriles está chula pero el resto de partes de acción... en fin... muy "plastiqueras". Y el drama de amor ese que se han sacado de la manga... Sin palabras.
    Lo dicho: "la desolación del (fan) espectador".

    Un besote!!

    ResponderEliminar
  9. Y eso que dicen que la segunda suele ser la mejor de las sagas (El Padrino, Star Wars...) Con la anterior "El Hobbit" Jackson terminó con mi paciencia ¿Hace fañta que sus películas duren tres horas? ¿Juega con nuestra paciencia? Además tuve la impresión de estar viendo escenas descartadas de "El Señor de los Anillos".
    Veré esta película pero en casa, en DVD y con picoteo. Es la forma de soportar a Jackson y sus excesos de metraje.
    Saludos. Borgo.

    ResponderEliminar
  10. Ayer estuvimos viendo la 1ª parte (otra vez) y a mí me volvió a gustar bastante, que emotivo cuando el pardo resucita a Sebastian... que bonito!
    Así que yo quiero ver la 2ª ya! y con que sea igual de entretenida me conformo ^^

    ResponderEliminar
  11. De veras? Ai, pues a mí, después de la gran decepción de la primera parte tengo que decir que quedé bastante satisfecho con esta segunda parte, que creo arregla muchos de los errores de su antecesora, además de que me hizo pasar un rato de lo más ameno a pesar de su duración. De echo tengo ganas de ver como termina la saga.

    Un saludete ;)

    ResponderEliminar