SERPICO

 

Título original Serpico

Año 1973

Duración 130 min.

País Estados Unidos

Director Sidney Lumet

Guión Waldo Salt, Norman Wexler (Novela: Peter Maas)

Música Mikis Theodorakis

Fotografía Arthur J. Ornitz

Reparto Al Pacino, John Randolph, Jack Kehoe, Tony Roberts, Biff McGuire, Cornelia Sharpe, Barbara Eda-Young, John Medici, Allan Rich, Ed Grover, Judd Hirsch

Productora Coproducción USA-Italia; Paramount Pictures / Dino De Laurentiis / Artists Entertainment Complex

Pacino cuando era hipster

Pacino de poli raso

Frank Serpico es un joven que ha entrado en el cuerpo policial, pero es un poli atípico. Es vivo, despierto, atento y sobre todo... honrado en un mundo dominado por la corrupción y los sobornos. Su objetivo es ser un buen poli infiltrado -su barba y su ropa de paisano le ayudan bastante- todo lo contrario del resto de policías que están metidos en el ajo.

Por películas así es como Pacino se labró gran parte de su fama, incluso recibió un globo de oro y fue nominado al Oscar. Su papel es visceral, duro y él se curra una interpretación soberbia, intensa, conteniendo la rabia de ver toda la mierda que le rodea, y mostrando su impotencia por no poder hacer nada en el sistema corrompido por todos lados.

Pacino muy fan de la trama Gürtel y del Bigotes

Y gran parte de culpa la tuvo el gran Sidney Lumet, con una dirección firme y acertada, contando una historia de polis corruptos rodada con buen gusto y tono duro y amargo que aportan una buena dosis de credibilidad que juega en favor de la cinta y hacen de ella un clásico contemporáneo.

Me ha gustado mucho y me arrepiento de no haberla visto antes. Las más de dos horas no se hacen nada pesadas en absoluto.

Peliculón.